Si estás pensando qué estudiar el próximo año y no has decidido si empiezas una carrera universitaria o si es mejor iniciar con un técnico que te permita trabajar pronto, este artículo puede ser la guía que estabas buscando.
Es importante considerar muchos aspectos antes de tomar una decisión de peso como esta. Recuerda que estás invirtiendo tu tiempo, dinero, las ganas y el esfuerzo que conlleva estudiar para prepararte profesionalmente.
Vamos a empezar aclarando los dos términos que definen esta decisión:
Una carrera universitaria es un programa de estudios completo, que te formará como un profesional en alguna de las áreas del conocimiento, y tiene una duración aproximada de 2 a 6 años, dependiendo del programa de estudios y el ritmo al que vayas avanza ndo.
Un técnico es un programa de corta duración (dura de 8 meses a 2 años aproximadamente) en un área específica. El programa brinda los conocimientos básicos para que empieces a trabajar.
Como puedes ver a primera vista, una de las mayores diferencias tiene que ver con la duración de cada grado académico. En mucho menos tiempo obtienes tu título técnico, mientras que un grado de bachillerato o licenciatura en la universidad te va a tomar más horas de estudio y preparación.
Sin embargo, la carrera universitaria te forma integralmente, abarca muchos más temas, conceptos y contenidos específicos, y algo muy importante, un título universitario tiene mayor valor a la hora de contratar personal. A mayor conocimiento y especialización, mejores ofertas laborales, salarios y oportunidades de crecimiento.
En nuestro sitio web puedes ver todas las opciones de cursos técnicos y carreras que ofrecen las universidades y otros centros académicos del país.
Ahora bien, te recomendamos considerar estos otros aspectos antes de decidir si matricular un grado técnico o si empezar con una carrera completa es lo mejor para tí:
Duración: Ya hablamos un poco sobre esto, pero siempre es importante considerar si estás buscando algo que te inserte al mercado laboral tan pronto como sea posible, o si prefieres llevar una carrera que tarda un poco más. En este caso puedes matricular los bloques completos para ir avanzando y sino pues llevas la carrera a tu propio ritmo, procurando no perder cursos ni quedar rezagado. El tiempo vale oro y en la universidad no hay tiempo que perder.
Costos: El tema del dinero y cómo financiar tus estudios siempre va a ser un factor determinante. Existen opciones de financiamiento educativo como préstamos, letras de cambio, becas académicas, o puedes ir pagando cada periodo mes a mes.
Nivel de especialización: Considera si estás buscando especializarte en un tema específico que te ponga a trabajar (es decir, en algo como Servicio al cliente, bases de Administración, Diseño, Contaduría, etc.) o si estás buscando una profesión de por vida.
Un técnico es algo así como un puente que te permitirá aprender las bases en un área específica, y te prepara para una carrera universitaria, que requiere una mayor inversión de tiempo y dinero, abarca en detalle todo lo relacionado a la profesión, y brinda un aprendizaje integral para que puedas ejercer como profesional.
Sientate con calma, solo o acompañado de alguien que te guíe (tu familia, algún amigo, profesor u orientador) y anota los pros y contras de matricular un técnico o una carrera, para ir perfilando tu elección final.
Recuerda revisar los planes de estudio, consultar por costos, opciones de financiamiento, horarios de los cursos, y otros aspectos igual de importantes como la ubicación del centro de estudios, qué ofrece a nivel de infraestructura, la calidad de los profesores y todo lo que puedas averiguar para que tomes la mejor decisión.