Llegó el momento de hacer la tesis: ¿qué hago? Esta es la pregunta más frecuente cuando aún no han empezado a surgir las ideas.Si ya estás en tu último año de carrera y empiezas a sentir la presión de empezar a hacer la tesis entonces antes de desesperarte mira los consejos que te traemos hoy.
- Busca un tema con el que te sientas cómodo, un tema que te guste. ¡Imagínate un año investigando sobre algo que no te gusta! Por eso piensa qué te ha gustado de la carrera y en qué quieres profundizar.
- Delimita, cuando te empiecen a surgir las ideas como lluvia, te parecerá que el trabajo es mucho; en este punto debes quitar lo que no sea necesario. Puedes delimitar en tiempo, espacio, temas o aspectos que vas a abordar.
- Busca un tutor de tesis, un profe que te pueda ayudar. No solo debes tomar en cuenta el conocimiento que tenga sino que sea agradable para trabajar en equipo; que te guíe y te corrija para lograr el objetivo que te has propuesto.
- Empieza, sí, empezar es lo más lógico pero lo que más cuesta. Poner en papel las ideas y ordenarlas en tu documento es importante para ver el avance. Puedes hacer carpetas de bibliografía secundaria, primaria, estado de la cuestión etc., de esta forma vas a seleccionar lo que necesites y a tener a mano lo secundario para consultarlo.
- Dedica tiempo. Como en el proceso de la tesis no tienes un horario definido sino que vas a tu propio ritmo y por eso podrías sentir que te cuesta dedicar tiempo de calidad y además en una buena cantidad. Quizá te funcione hacer un horario y respetarlo para así saber cuántas horas a la semana le vas a dedicar a la tesis.
- Prueba y error. Este proceso de investigación es arduo, pero definitivamente solo así vas a aprender a investigar; por eso no te frustres si te corrigen una y otra vez tu documento, de eso se trata, de aprender. Al final verás el resultado deseado.
- Asesoría externa. Nos referimos a profesionales que te pueden ayudar a mejorar tu trabajo; como un bibliotecario o un filológo. ¿Para qué? Para el uso de las bases de datos en donde podrías encontrar información valiosa, para afinar detalles de bibliografía y citación; y finalmente el filólogo para que te ayude a dejar un texto lo más nítido posible y sin errores.
- Defiende la tesis. Es como cruzar la línea de meta. La satisfacción de haber terminado tu trabajo no será completa hasta que no lo defiendas. Prepárate con tiempo, has un resumen para que puedas explicar todo en los 20 minutos que te dan. ¡Y sin miedo a las preguntas!
Por supuesto que si aún tienes dudas lo mejor es que puedes hacer es buscar asesoría en la escuela que te corresponde y empezar a averiguar cómo es el proceso en tu universidad. ¿Ya te dieron ganas de empezar? La tesis es toda una aventura, no la pospongas, sigue nuestros consejos y pronto tendrás tu título en las manos.
